15 junio 2011

Contingencia mental.

Vivimos tiempos en los que el lenguaje (oral y escrito) está sufriendo graves malformaciones y eso es realmente alarmante, como una contingencia ambiental, pero aquí es mental, y en la que los valores de I.Q. van en caída libre a las categorías por debajo del promedio. A los problemas comunes de mala ortografía se les adicionan los de mala escritura, ya sea por flojera (justificada como "comodidad"), o por modas infantiles o retrógradas.

A mí no me gusta explicar cosas por escrito a través de internet, porque pienso mucho más rápido de lo que soy capaz de escribir, y eso me desespera; en vez de usar todo ese nuevo "lenguaje escrito" lleno de abreviaturas (en el mejor de los casos), prefiero usar conversaciones de audio, o citar a quien le interesa el tema para hablar personalmente, o de plano ponerlo todo por escrito para luego compartirlo, como lo hago en estos blogs.

Las consecuencias de esas malformaciones se pueden percibir en la redacción. LA GENTE EN GENERAL NO SE DA CUENTA DE LO QUE ESTÁ DICIENDO AL ESCRIBIR, PORQUE TAMPOCO ENTIENDE LO QUE DICE. Aún cuando sepa lo que quiere expresar, no es consciente del significado de las palabras que está usando o si está usando las palabras correctas; sólo expresa algo que fonéticamente parace coincidir con lo que pensó, y a veces uno tiene que interpretar lo que realmente quiso decir, incluso para saber si está preguntando algo o si lo está asegurando o quizá exigiendo; a veces hay varias frases escritas sin ninguna separación y así no tienen sentido hasta que tratamos de interpretarlas.
Hay una frase en la saga de la Guerra de las Galaxias en la que Qui-Gon Jinn le dice a un ser de otra especie (que es bastante torpe), "la capacidad de hablar no te hace inteligente"... lo mismo puedo decir yo de mucha gente que conozco jeje.

Muchas personas son víctimas de la confusión de palabras con misma fonética pero diferente escritura y significado, así como de las elisiones causadas por no ser conscientes de las sinalefas, y los errores de conjugación o de concordancia de género y número, además del uso nulo de signos de puntuación, por lo que encontramos cada cosa más bizarra que va del simple descuido hasta barbaridades que causan "gracia" a "cualquiera".

Uno no sabe si reir o llorar cuando ve escrito cosas como: "voy a ser la tarea", "io keu 1 bso", "vamos haber q pasa", "kien save komo se dise", "quien @$#%* me esplica" (sustituir los garabatos por al menos una grosería), "no baber clases manana", "lo importante es las cosas que vale la pena", "ubo muchas gentes", "ps es q no c q honda we", "stamos en facebook aki todo c vale", etc., etc., etc.

En una ocasión, alguien escribió en Facebook: "estoy triste, quiero que me abrasen"... afortunadamente no fue un deseo escrito al genio de la lámpara, porque en ese caso, en lugar de rodearla con los brazos, la hubieran rodeado con leña y le hubieran prendido fuego jejeje.

El problema es más grave que chistoso. Hace años, unos cursos de redacción se promocionaban de la siguiente manera: "SABER REDACTAR ES SABER PENSAR".

Esa es la esencia del problema. Si lo que no se usa se atrofia, el no hacer conciencia del significado de las palabras al usarlas para escribir va mermando los procesos de raciocinio, lo cual impacta en la capacidad intelectual del individuo, así como la falta de vocabulario lo hace en la cultura del mismo.

Para colmo, la lectura es un hábito que está perdiendo terreno con respecto a otras actividades más visuales como series o videojuegos, y esa era una fuente importante de reconocimiento de ortografía, de ampliación de vocabulario, y de obtención de conocimientos específicos o de cultura general.

No está de más decir que si la escritura es pésima, el contenido está a la altura de las expectativas. Uno podría pensar que es un problema de las nuevas generaciones (hace años bromeábamos sobre la "generación Chernobyl", porque la radiación había destruído sus neuronas jeje), pero no es así, ya que estos problemas los encontramos en personas de cualquier edad y con cualquier tipo de formación (es patético leer o escuchar a los supuestos "universitarios").

Si la mala escritura es la manera de medir a las mentes limitadas, entonces a cualquier gobierno, grupo de poder, organización secreta, o quien sea que quisiera mantener a las masas en la ignorancia en plena era de la revolución cibernética, le causaría una enorme satisfacción navegar por internet y revisar lo que se escribe en las redes sociales.

Los malos hábitos de escritura son, a largo plazo, más efectivos que la represión violenta, los prejuicios sociales, el temor religioso, o la enajenación a través de los medios audiovisuales, porque funcionan como una enfermedad degenerativa que ataca directamente al cerebro, en donde reside la "mente" que gobierna las cualidades que supuestamente nos hacen especiales: la consciencia, la memoria, la razón y el lenguaje.

Muy cortos se quedaron en sus visiones "proféticas" gente como Orwell o Huxley, pues ningún arma química o bioquímica, ningún sistema autoritario y represivo, ninguna doctrina dogmática, ninguna de estas opciones es más eficiente que esta aniquilación sistemática del "Homo sapiens" para dar paso al "Homo servus", y no por las máquinas, como sugiere la ciencia ficción; esta es la realidad del siglo XXI, en los albores de la era de Acuario.

Y tú ¿a qué clase de "homo" quieres pertenecer? Pues no importa lo que expreses al respecto (ya vimos que puede no ser claro o congruente), pero tus acciones te llevarán, irrefutablemente, a una de las dos opciones, eso es seguro.


(evolución del primate al homo servus)


PD. "servus" significa esclavo en latin ;-)

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